Durante el embarazo, hormonas como la relaxina ayudan a que el cuerpo, y sobre todo el suelo pélvico, se adapten poco a poco. Aquí es donde entra en juego el masaje perineal: en las últimas semanas de embarazo, se recomienda realizarlo para ganar elasticidad en el perineo y reducir así el riesgo de desgarros en el parto.
¿Cómo se hace el masaje perineal?
El masaje perineal combina distintas técnicas, tanto internas como externas, que ayudan a relajar los músculos del suelo pélvico y a mejorar la circulación de la zona. En consulta, una especialista en suelo pélvico enseñará a tu pareja a realizar la secuencia correcta usando un modelo anatómico de la pelvis, para que así podáis hacerlo en casa con total seguridad. Si hay alguna contraindicación para las técnicas internas, no te preocupes: podemos adaptar el masaje para trabajar la musculatura solo desde el exterior.
Es normal que sientas algo de tirantez o molestia, especialmente si tu musculatura está muy tensa, pero el masaje nunca debería causar dolor. Poco a poco, irás notando menos molestia a medida que el suelo pélvico se relaja y se hace más flexible.
¿Para qué sirve el masaje perineal?
El masaje perineal tiene muchísimos beneficios en el embarazo, entre los cuales destacan:
- Preparar el perineo para el parto: Ayuda a prevenir desgarros y reduce la probabilidad de necesitar una episiotomía. Y, en caso de que haya desgarro, suele ser más leve gracias a que el perineo está más elástico.
- Facilitar la recuperación postparto: Las mujeres que realizan masaje perineal suelen tener una recuperación más rápida y con menos dolor en la zona.
- Conectar con tu suelo pélvico: Esta técnica te permite conocer mejor tu suelo pélvico y te ayuda a prepararte tanto física como mentalmente para el parto, lo que también aumenta tu confianza en este momento.
¿Cuándo empezar a hacer el masaje perineal?
La recomendación es empezar con el masaje perineal a partir de la semana 32 de embarazo, sobre todo si es tu primer embarazo o el primero en el que planeas un parto vaginal. Así, das tiempo a tu perineo a adaptarse poco a poco. Si ya has tenido partos vaginales, puedes empezar unas semanas después.
Frecuencia recomendada:
- Desde la semana 32 hasta la 36: realizar el masaje tres veces por semana.
- A partir de la semana 36: realizarlo en días alternos, unos 10-15 minutos por sesión.
>> Recuerda que tu fisioterapeuta puede darte pautas personalizadas según las necesidades de tu suelo pélvico.
¿Quién debe hacer el masaje perineal?
La preparación del perineo para el parto debe estar supervisada por un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico. En Clínica Sanalia, recomendamos combinar las sesiones en consulta, donde trabajamos en puntos específicos para relajar el suelo pélvico y también abordamos la movilidad de la pelvis y el trabajo de pujo, con sesiones en casa que tu pareja puede realizar con nuestras indicaciones.
Algunas mujeres prefieren realizar el masaje en consulta o aprender a hacerlo ellas mismas. Sin embargo, la autoaplicación puede ser más complicada, ya que es difícil acceder a la zona con la profundidad suficiente.
¿Cómo puede ayudarte Clínica Sanalia a preparar el suelo pélvico para el parto?
En Clínica Sanalia te acompañamos durante todo el embarazo, con clases de ejercicio para embarazadas, sesiones de fisioterapia prenatal y talleres de dilatación en los que incluimos el masaje perineal para que practiques con tu pareja. Además, recientemente hemos incorporado el servicio de ecografía 5D, ¡para que puedas ver la carita de tu bebé!
Si necesitas más información, visítanos en Clínica Sanalia en Avd. Retamas 16, Alcorcón, o contáctanos a través de:
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